Y me quedé parado en esa esquina, mirándola desaparecer mientras se me desgarraba el alma, con el frío acompañando a mi tristeza, clamando al unísono por recobrar la calma. Y no es que ya no le adorara, simplemente comprendí que era el momento justo para dejar que se marchara, llevándose consigo mis suspiros, mi corazón y hasta mis sueños enfundados en la nada.
¡Que no se muera la pluma! Foro de interacción en pro de la lectura, escritura y algo más.
sábado, 27 de febrero de 2016
martes, 16 de febrero de 2016
Amémonos
Hola
si me recuerdas no digas nada
sé que no estás sola, que está a tu lado
que estás casada.
Pero si tienes tiempo
dame un momento para decirte
qué es tanto el tiempo
que ha transcurrido
y no te olvido.
¡No señor!, no se preocupe, está dormido
sí señor, con mucho gusto, yo se lo digo
sabe usted que su llamada es bienvenida
que me siento su amiga, buenas noches señor.
Antes de que cuelgues, te suplico corazón
que cierres los ojos y recuerdes por favor
esa melodía que solíamos cantar
cántala en silencio, te lo pido por favor.
Amémonos con tanta fuerza que escuchemos
nuestro llanto de dolor
besémonos, que nuestros labios se provoquen
el mismo calor.
Y que con el paso de los años
vuelvan a experimentar
esos sentimientos
que nos hicieron soñar.
Roberto Soria - Iñaki
si me recuerdas no digas nada
sé que no estás sola, que está a tu lado
que estás casada.
Pero si tienes tiempo
dame un momento para decirte
qué es tanto el tiempo
que ha transcurrido
y no te olvido.
¡No señor!, no se preocupe, está dormido
sí señor, con mucho gusto, yo se lo digo
sabe usted que su llamada es bienvenida
que me siento su amiga, buenas noches señor.
Antes de que cuelgues, te suplico corazón
que cierres los ojos y recuerdes por favor
esa melodía que solíamos cantar
cántala en silencio, te lo pido por favor.
Amémonos con tanta fuerza que escuchemos
nuestro llanto de dolor
besémonos, que nuestros labios se provoquen
el mismo calor.
Y que con el paso de los años
vuelvan a experimentar
esos sentimientos
que nos hicieron soñar.
Roberto Soria - Iñaki
Dile viento
Ya nunca miraré tu cara
ya mis manos no te van a acariciar
en silencio voy a decirle a mi almohada
que te tuve y nunca te voy a olvidar.
Las estrellas me dirán dónde te encuentras
y la luna me guiará hasta tu portal
en silencio voy a decirte cariño
soy tu sombra que te quiere de verdad.
No me importa que no puedas escucharme
si el murmullo de los grillos te dirá
que te quiero y que no puedo consolarme
dile viento que la espero una vez más.
Roberto Soria - Iñaki
lunes, 15 de febrero de 2016
Estructura de calidad
Roberto
Soria - Iñaki
Dramaturgo mexicano
Misión:
Crear
textos literarios de calidad que contribuyan al fomento de la lectura resaltando
la importancia de los valores universales, evitando en la medida de lo posible
términos que lastimen, ofendan o discriminen, salvaguardando identidades y entornos
confidenciales en caso de que la narrativa incluya hechos reales.
Visión:
Visión:
Trascender
en el rubro literario, adaptándose a los cambios constantes que demanda la
evolución tecnológica, evitando en lo posible el uso indiscriminado del papel para
la manufactura de los libros en un intento por contribuir en la preservación de
los recursos naturales, utilizando como alternativa la de publicar en los
medios electrónicos vigentes, viables y rentables.
Valores:
- Ética
- Honestidad
- Responsabilidad
- Compromiso
- Respeto
Políticas:
- El autor se reserva el derecho de hacer pública la identidad de los personajes reales de las narrativas, recurso que en caso de ser utilizado no será para exhibir, perjudicar o dañar la imagen de alguien en particular.
- Los lugares incluidos en las obras y los eventos históricos de cualquier ámbito se basan en temas de dominio público obtenidos de viajes, recursos mediáticos y de Internet entre otros.
- Cualquier sección presentada como extracto de una obra protegida de otro autor, ya sea parcial o total será previa a la autorización correspondiente de quien reserva los derechos legales de autoría.
- Las obras a publicar serán invariablemente inéditas, de tema libre y sin pretensión de promover actos contrarios a la moral, quedando en manos del lector la responsabilidad de la interpretación de los contenidos.
Aviso:
Cualquier
semejanza con la vida real en el implícito de los textos es mera coincidencia
Todos los derechos del blog son reservados
Todos los derechos del blog son reservados
domingo, 14 de febrero de 2016
Por qué escribir
No escribo por ocio, lo hago en un intento por erradicar la ignorancia que se resiste en abandonarme, que manipula mi razón minusválida gracias a la patología que me invade.
Pero mi voluntad habrá de imponerse a tan perversa enfermedad, contrarrestando la sintomatología con la lectura y continuidad.
Roberto Soria - Iñaki
La verdad
La verdad es
una adecuación entre una preposición y el estado de cosas que expresa,
conformidad entre lo que una persona manifiesta y lo que ha experimentado,
piensa o siente, no hay verdad absoluta, todo depende del color del cristal con
que se mira, es un plano que invariablemente presenta dos aristas, la negativa
y la positiva, situaciones que generan controversia entre quienes defienden una
postura conveniente relacionada con la relatividad.
Bajo esa
premisa se escribe, riesgo que implica críticas constructivas y contrarias, hay
quienes de manera intrépida se atreven a juzgar y calificar a los dramaturgos
como dioses, argumentando la potestad de crear, de dar vida o muerte a los
personajes que se describen en las narrativas sin importar el género literario.
No obstante
es grato encontrar controversia, tela para cortar dispuesta en la mesa de
trabajo para ser discutida entre el escritor y el lector, diseño que a fin de
cuentas persigue el propósito de capturar la atención de quienes gustan de
sumergirse en un mundo paralelo lleno de fantasías que terminan confundiéndose con
la realidad, quimeras que se persiguen como parámetro para medir la capacidad ilimitada
de la mente que deja una enseñanza, un mensaje.
Es hermoso comprobar
que no existen barreras en los libros, que no hay manuscritos estériles,
cada estilo tiene un propósito específico, es como un traje a la medida hecho
para cada cultura, para cada nivel socioeconómico, para cada aspiración
profesional.
Las obras quedan, se convierten en testigo mudo de un proceso
filosófico observado por la humanidad, ¿para quienes? Para todas las
generaciones presentes y futuras, huellas que no se borran sin importar las
alteraciones del camino, podrán cambiar las formas de escribir, reformadas y
sustituidas por la tecnología, pero la esencia, el fondo siempre será el mismo,
es por eso que decreto, que no se muera la pluma.
Roberto
Soria – Iñaki
Hasta pronto
sábado, 13 de febrero de 2016
Zeep el mensajero
Novela de
ciencia ficción que pone en entredicho creencias y ocultismos, que muestra pasajes reales propios del planeta tierra, un mundo
explorado por seres extraterrestres, haciendo énfasis en los descubrimientos,
avances evolutivos y conflictivos que moldean una estructura llena de transiciones.
Filosofía,
ciencia, dogmas y testimonios se conjugan en un intento por descifrar el mensaje que
encierra la verdad tan esperada sobre la teoría de la creación. Mucho se ha
especulado sobre la veracidad de quienes fueron proclamados profetas no
obstante las evidencias existentes, contundentes, matemáticas y llenas de
lógica.
Misterio,
secretos y distorsiones sobre los fenómenos que surcan nuestro espacio, escepticismo
sobre posibles soluciones al complejo deterioro del planeta, de la civilización.
Acompaña a
Jeremy en un viaje que jamás imaginó, descubre el encuentro suí géneris con
Zeep, un mensajero intergaláctico cuyo legado se convierte en esperanza de preservación, de un
cambio que altere el curso del cataclismo pronosticado para la tierra.
¿Qué pasará?,
logrará imponerse la perversidad mezquina que permea en estos tiempos, será
la ciencia la que determine el curso a seguir para lograr la supervivencia, o
quizá sea la fe en un cambio conductual en favor de rescatar lo que parece
perdido.
Sin duda una narrativa osada, de tintes irreverentes que suponen eventos utópicos que generan dudas sobre lo factible.
Atrévete a conocer la misión de Danasha, una misteriosa enviada que será la encargada de dar vida al ser tan esperado.
Mariposa de alas rotas
María Fernanda, una adolescente ordinaria como existen muchas, joven con aspiraciones apegadas a derecho, con deseos concretos por evolucionar en el marco social que su cultura ofrece.
Pero
conquistar sus metas no es sencillo, de hecho ni siquiera se imagina que deba
recorrer caminos no previstos, crece en un entorno poco favorable madurando etapas
no deseadas.
Pedro, un
joven voluntarioso en el terreno equivocado, atrapado entre dos aguas que le
ofrecen soluciones distorsionadas.
Drogas,
delincuencia y crimen, estigmas que los acompañan, pero nada frenará su desafío,
el de retomar la ruta que les permita vivir de forma digna, honesta, entendiendo
que la unión que provocaron sólo es de ellos.
Nunca
imaginaron que sucesos dolorosos contribuirían al saneamiento de sus karmas,
dispuestos a romper la estadística que marca la tendencia de una juventud
desenfrenada, su convicción es tal que sus apegos y costumbres se ven
modificados en pro de su felicidad. Un ejemplo claro de que se puede cambiar un
rumbo tan escarpado.
Roberto
Soria - Iñaki
Lectura
recomendada.
Pequeño grillo
Pequeño
grillo
no le llores
entibia con
tu canto el frío que te envuelve cada noche
no le
implores.
Busca a la
luciérnaga
es un faro
que ilumina disipando las tinieblas
dirígete a
los montes
las estrellas
te dirán donde se encuentran.
Que tus
saltos aminoren la derrota
y si
encuentras un reptil date la vuelta
no lo
enfrentes
puede herirte
con el filo de su lengua.
Si el
cansancio te abatiera date un tiempo
no apresures,
marcha lento
no hay dolor
que se resista a la ternura de otros besos
cierra el
ciclo, ponlo en venta.
La que
buscas pagará más de la cuenta
si la
encuentras no te dobles, ponte erguido
tu postura
vencerá su desafío
y al mirar
que sigues siendo de una pieza
su tristeza
le dirá que te ha perdido.
Roberto
Soria - Iñaki
Arma de dos filos
La tecnología por una parte nos impulsa, nos convierte en seres
vanguardistas, actualizados y duchos en el manejo de tantos artilugios que en teoría
simplifican nuestra vida. Sin embargo y con tristeza observamos que el precio a
pagar por obtener dichos avances es muy alto, nos vamos perdiendo a una
velocidad vertiginosa entre lo espeso de la incongruencia, los padres ya no
hablan con los hijos y viceversa, la disociación familiar es ya una constante, el ejercicio mental es cosa del pasado gracias al chip externo que siempre nos
acompaña, ese dispositivo que almacena megas y gigabytes de información que nos
resuelve cualquier duda.
La convivencia empieza a buscar un sitio en los registros
del pretérito, la conciencia sobre los actos que ejecutamos se vuelve nula,
hacen falta esquemas, incluso legislaciones que regulen el uso de tan paradójico
progreso.
Hoy en día la población en nuestro país como en muchos otros
sufre los cambios conductuales que se reflejan en las nuevas generaciones, brechas
que se vuelven abismales en todos los sentidos, más que nunca ese viejo adagio
de “los patos le tiran a las escopetas” es parte cotidiana en la juventud.
Sin embargo, qué o quiénes contribuyen para que la era
tecnológica se apodere de las mentes frágiles y esnobistas. ¿En realidad
evolucionamos?, o tan sólo revolucionamos, y mucho tiene que ver la relegación evidente de los valores, aunada
a la ambigua interpretación y fundamentación de los derechos humanos genera
confusión en el deber ser.
Delegar responsabilidades y conjugar de manera correcta el
don de mando con el don de gente no es algo baladí, filosofía que se ve mermada
cuando los roles de los actores no está bien definida, cada miembro de una
familia y de cualquier organización tiene obligaciones, responsabilidades,
derechos, pero se frustran ante la confusión que se obtiene al carecer de
acuerdos fundamentados.
No hay metas, objetivos, filosofía, valores, misión, visión,
políticas. Cada quien con sus mejores argumentos termina llevando agua a su
propio molino creyendo que hace lo correcto, sin trabajar en equipo tratamos de reinventar el hilo negro en lugar
de aprovechar los recursos ya existentes, y no es que sea contrario a la
creatividad de los genios que contribuyen al desarrollo de la humanidad no,
reitero la esencia del rol, de las habilidades, de las capacidades que cada uno
posee.
Comprender y balancear defectos y virtudes no es sencillo, pero en la
medida en que se logre los beneficios serán sustanciales.
Dejo en el tintero la disyuntiva de construir para destruir,
o bien, la de renovarse o morir, cualquiera que sea la elección debería estar
sustentada en el bien común, en el de la preservación de las especies.
Hasta pronto.
Roberto Soria - Iñaki
Roberto Soria - Iñaki
Sátira literaria
Un pueblo hambriento
y ávido de educación es el reflejo del hartazgo que genera la falta de
oportunidades, enfermedad mortal que provoca el virus de la tiranía, pero esta
patología tiene cura, nada mejor que el hábito de la lectura, la mejor
medicina, aunque como todo tratamiento tiene sus contraindicaciones, pude
generar adicción y dependencia. Los síntomas más frecuentes son:
1.- Sensación de ansiedad por la superación
constante
2.- Agudeza visual en futuras expectativas
3.- Delirio de autonomía
4.- Pérdida gradual de la ignorancia (Crecimiento
de la glándula intelectual)
5.- Inapetencia a la demagogia cancerígena
6.- Disminución de las células que
provocan la apatía y falta de compromiso
7.- Aceleración del ritmo cardíaco por
ruptura de paradigmas
Puede
presentarse fiebre acompañada de alucinaciones que hacen suponer al enfermo que
se encuentra en un entorno de emancipación y autosuficiencia que le permite
capitalizar sus sueños.
Si las
molestias persisten es recomendable acudir de inmediato a la librería más
cercana para auto recetarse la literatura necesaria o bien, a una consultoría de confianza para que
le diagnostiquen sus habilidades y le prescriban el proyecto de vida que le
hará triunfar sobre la enfermedad que le aqueja.
Roberto Soria - Iñaki
Roberto Soria - Iñaki
viernes, 12 de febrero de 2016
No te lleves mi vida
No te manches
con mi pena
deja la daga sobre
aquella mesa
no hace
falta que apuñales
mi dignidad ya casi muerta.
mi dignidad ya casi muerta.
Anda,
sírveme una copa pero rómpele los bordes
quiero que
mis labios lloren al contacto
para que mi sangre se mezcle con el vino
en singular ritual de despedida.
Ven
acaricia mis sueños antes de marcharte
toma la frazada que cubrió nuestros decretos
para que borres las huellas de tus pasos.
Pero no apagues la luz
quiero embelesarme y registrar en mi mente los recuerdos
y cuando te vayas no cierres la puerta, permite que la
estela de tu aroma
se encargue de retardar la llegada de la angustia.
No te lleves mis caricias
tampoco la silla
deja que descansen mis suspiros entibiando su respaldo
para recibir ansioso la llegado de otros besos.
Déjame la almohada
quiero platicar con ella de los sueños que tuvimos
no te compadezcas
aquí no pasa nada.
Cuando cruces esa puerta
mi corazón gritara desesperado que te quedes
pero no lo escuches
deja que las sombras de la soledad lo envuelvan.
Y el libro que se quede
mi pluma sin dudar lo extrañaría
aún quedan páginas en blanco
para ser llenadas con la historia de mi vida.
Adjudícate el florero
las rosas siguen tibias
pero no te lleves mis lamentos
no te lleves mi vida.
Roberto
Soria - Iñaki
Claro-oscuro
Soy un inadaptado
en busca de estacionar mi ignorancia
entre las banalidades de la vida
Roberto Soria - Iñaki
El silencio de la muerte
Me despertó el color de la noche turbulenta
y al experimentar lo espeso de su negrura cruda
extendí los brazos en un acto de ternura
hasta perderme en su profundidad inmensa.
Luego entonces la pasión alborotada
asió mis manos en un acto de cordura
le bisbiseo a mi angustia con palabras de dulzura
que le tomara ardiente como el tigre a su presa.
Heme aquí, me dijo complacida
soy la sombra del amor que te atormenta
y aunque es cruenta la batalla sostenida
vengo a ti para entregarme pura.
El silencio fue testigo del hartazgo
ni siquiera reparamos en el tiempo
un suspiro nos llenó una copa
para bebernos el placer a ritmo lento.
No había freno para detener la inercia
ni reclamos para aminorar el fuego
sólo sé que me perdí en la anchura
del torbellino ardiente que acompañaba al ego.
Enajenado por la sensación descrita
la llevé hasta el centro del universo encima
y en el fulgor de las estrellas, preso
me refugié en su plexo para sentirle viva.
Más una voz interrumpió mi sueño
me dijo, ¡iluso que abusaste de tu suerte!
no tengas miedo y quédate a mi lado
oye el silencio que trajo para ti la muerte.
Roberto Soria - Iñaki
Karma
Tocaste a mi puerta, tú
que me cerraste la tuya cuando más necesitaba
sin reparar en los jirones de mi piel ensangrentada
¡mira pues que paradoja!
tus heridas son más grandes que el cráter que asfixiaba mi existencia
más no he de hacer escarnio de tu pena, sigue andando
tal vez encuentres otros brazos que te quieran.
La cicatriz que miras en mi pecho es sólo un borde
me extirparon el dolor que atormentaba
ya no hay llanto, ni más nada
y el destello que ilumina mi mirada tiene nombre
no entusiasmes, no es el tuyo
es de alguien que comparte mis anhelos
en mi almohada.
Añagaza
Le grité un reclamo al cielo por las vicisitudes de mi vida
y éste me respondió con el viento entristecido.
No soy culpable de tu ignorancia
mucho menos de tu demencia fallida
a lo largo de tu andar te brindé oportunidades
tantas como la hierba silvestre que tapiza los trigales
y qué hiciste; ¡derrochaste!,
no supiste aquilatar las semillas que tus pies pulverizaron.
No obstante lo acontecido no debes preocuparte
te concedo lo que te resta de vida para que retomes el camino
pongo a tu disposición lo que la naturaleza otorga
puedes saciarte en exceso de las maravillas de este mundo
no te limites, toma lo que puedas hasta apaciguar tu ego
la responsabilidad de la administración es toda tuya
y la próxima vez que apeles piensa
si tus manos están vacías
no ha sido por culpa mía.
Ojos de gato
Una historia en donde los protagonistas generan un entorno envolvente que muestra la complejidad de una relación en pareja, cuyas diferencias terminan provocando un caos existencial. Cómo conocer a la persona amada si no somos capaces de conocernos a nosotros mismos, cómo romper los paradigmas que encaminan al cataclismo gracias a la falta de compromiso, de valores. Hay personas que dan todo por el ser querido, pero también existen quienes fincan sus expectativas en promesas sin fundamento, en engaños, en mentiras.
Esta retrospectiva le presenta al lector un análisis reflexivo del riesgo que conlleva el confiar en quien no se debe, narrativa basada en hechos reales. Toda relación tiene sus bemoles, un porcentaje importante termina ríspido, incluso con tintes dramáticos que contemplan la muerte como una solución. Basta con mirar las estadísticas de divorcio que existen hoy en día, o las relativas de quienes se encargan de estudiar lo conductual, esos que determinan que el amor tiene un periodo de duración muy corto.
Pero la vida no se detiene, sigue su curso inexorable para dar cabida a nuevas experiencias, a cambios radicales que marcan las tendencias. Para ciertos segmentos demoledores, para otros libertadores. Mientras hay quienes buscan rescatar los preceptos extraviados otros se ocupan por adaptarse rápido a las demandas de un mundo banal.
Falta mucho trecho por recorrer para que el grueso de la humanidad logre alcanzar la madurez adecuada que permita finiquitar una relación en los mejores términos, no sólo amorosa, también las concernientes a la amistad, los negocios, las profesionales y, en general, todo aquello que afecte el flujo armónico de la sana convivencia.
La distancia ente la cordura y la locura pareciera ser abismal, pero a veces resulta tan milimétrica que un acontecimiento incontrolable puede ubicar a la razón en un viaje sin retorno.
jueves, 11 de febrero de 2016
Luciérnaga
Buena comparación por la analogía que representa. En el viaje inexorable dentro del tiempo se habla, se escribe y se debate el inexpugnable tema de la violencia de género, desde la creación de la humanidad la mujer ha tenido, tiene y tendrá un rol estelar todo gracias a la perfección de su arquitectura, de lo fino y delicado de esa energía que posee, la cual de manera paradójica emana en los momentos cruciales transformando su fragilidad en un torbellino poderoso que arrasa las adversidades y es capaz de dar vida sin importar el dolor o sufrimiento que la labor demande.
Luciérnaga, un libro
que narra la historia de una adolescente qué, como muchas es víctima de las
circunstancias, del error y el acierto mal combinados, de sistemas judiciales
mal administrados y, de enfermos mentales que anteponen sus mezquinos intereses
a los valores universales. Lo impactante del caso es la ausencia de estupor,
hablo de la trata de personas, del comercio más aberrante que lacera y extermina
cualquier forma de vida, de razonamiento. Ya ni siquiera genera duda cuando se
señala la posibilidad de que las instancias encargadas de preservar los
derechos humanos estén involucradas, y no sólo como espectadores, sino formando parte
activa de la proliferación y fortalecimiento de tan añeja actividad delictiva.
Justificaciones para cometer ilícitos existen muchas, tan
trilladas que han logrado convertirse en un cliché, argumento que pretende minimizar la
dimensión del daño aprovechando los recovecos que deja una legislación ambivalente.
Los años pasan y el único cambio logrado en el fenómeno de
la esclavitud es la modificación del término, abusos que lejos de ser
erradicados se diversifican para dar paso a nuevas atrocidades lucrativas. El esquema mediático muestra y hasta ostenta artículos
diversos de tales acontecimientos, denuncias abiertas, gritos clamando justicia
que se pierden en el horizonte infinito de la impunidad, ahogándose en la
ignominia y la desesperanza, escuchando promesas demagógicas que sólo disfrazan
la ineptitud y negligencia de quienes en teoría están obligados a salvaguardar
la integridad de las personas.
Y aquí estamos, observando estadísticas armadas
con amaño, con mentiras, maquillando la verdad que aflora en cada comunidad,
en cada esquina.
La alternativa ante la desconfianza que genera la corrupción
y burocracia es clara, la de valerse por sí mismos ¿Actos contrarios a la
razón?, sin duda, pero necesarios ante la pasividad y falta de atención de
quienes permanecen impávidos ante el genocidio que avasalla sin límites a una
sociedad tan lastimada.
La protagonista de la historia en este manuscrito deja un
legado valioso derivado de su intrínseca experiencia, vale la pena conocer los
hechos, la re-ingeniería conductual es imperativa para evitar un cataclismo, no
todo estriba en una simple sentencia, Pitágoras decía; Educad a los niños y no será
necesario castigar a los hombres.
Roberto Soria - Iñaki
Hasta la próxima
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